Los átomos del amor

Cuando hablamos de amarse dos personas, yo digo lo siguiente, que hablar del amor es como hablar de la tabla periódica de los elementos.

Te ves así al amor que es capaz de convertirse en todas las acciones de vida. El amor está en tu propio sentir a ti mismo y a la vida y a las personas y criaturas de la vida. El amor no es una búsqueda exterior, sino que te vives el amor según como tú te lo estás viviendo en tu propia persona. Esto es en todas las acciones de la vida.

Toda la vida humana está gobernada por el amor (cuando el amor gobierna; y si es un amor verdadero entonces será un amor inteligente). Toda la vida humana está regida y dirigida por la fuerza o el impulso del amor, en el amplio sentido vital que tiene el amor. Que es, en el ejemplo con la materia, como decir que el amor ocupa todo el espacio de realidad que materializa la tabla periódica de los elementos, capaz de convertir una entidad única (el átomo) en distintas materias, según es la organización atómica.

Una materia que, en esta metáfora del amor, nos deja ver múltiples espacios de vida, el espacio que convierte en plata, oro, estaño, cobre, gases nobles, oxígeno, pero la cuestión es que tenga átomos y los átomos es la materia prima de la materia, así como también el amor tiene unidades indivisibles o atómicas, partículas de amor, que no son exclusivas del hombre-mujer.

El amor en realidad es todo y está en todo. Tu propio vivir es un fluir de amor y, al tiempo que estás viviendo, estás compartiendo amor con el conjunto de la vida. Es evidente, de nuevo, si sientes amor dentro de ti y este amor es verdadero, real. Es el amor que se expresa en una variedad de actos de vida tan amplia como es amplia la materia que escenifica la tabla periódica de los elementos.

AMOR. Es el conjunto del amor que sale de nosotros y que entra a nosotros. Y todo eso es también amor. ¿Cuándo es amor?. Evidentemente cuando lo sientes y lo vives y lo piensas con amor, entonces es amor.

Por tanto, el amor no se fabrica en la realidad de la materia y del futuro; el amor nace en la propia persona, en la invisibilidad de los sentimientos, emociones, pensamientos; en la realidad del hoy; el amor no vive condicionado por la realidad de mañana, de vamos a hacer esto o vamos a hacer aquello.

En la realidad del ahora el amor se expresa a través de un hombre que pone migas de pan a los pájaros. La calle está completamente solitaria pero digo, es feliz la calle, feliz porque la están habitando criaturas felices, gatos asomados a las ventanas, dos perros jugando, algún pajarillo valiente que se atreve a jugar con los perros y a picotear en las migas de pan. Una bandada de gorriones, en una higuera, esperando turno para las migas que quedan en el suelo.

El amor en realidad es todo y está en todo.