AutoConocimiento

El mundo del autoconocimiento y de la investigación trascendental de los comportamientos humanos, el mundo de la metafísica no es ni malo ni es bueno. De la misma forma que un científico no es malo ni es bueno que estudie química, biología, etcétera, tampoco es malo o bueno que una persona se meta de lleno en esos asuntos psicoespirituales.

Buscadores de la espiritualidad humana. Por resumir, dando un resumen simplista y facilón, vamos a dividirlos en buscadores solitarios o independientes y buscadores que actúan en grupo.

Los que actúan en grupo, lo más fácil es hallarlos que hablan por los labios del grupo al que pertenecen, actuando como propagandistas del grupo sea cual fuere el nombre del grupo.

Los que actúan en solitario o en independiente, son infinitamente más honrados y cabales, pero corren infinitos mayores riesgos.

Por su soledad, puede que acaben la búsqueda derrotados, aislados, herméticos al exterior, incomprendidos e incomprensibles, encerrados en su propia búsqueda, en ocasiones desequilibrados, en ocasiones sin aguantarse a sí mismos.

De quienes han tirado la toalla, de quienes han renunciado a su búsqueda, de quienes en el transcurso de su experimentación han caído en la desazón de conclusiones falsas y sin ninguna base o fundamento, de quienes han acabado siendo una farsa o un hazmerreir de ellos mismos, de todas esas personas ahora yo no voy a hablar.

Voy a hablar solamente de quienes siguen investigando de forma independiente, llevando en su soledad el resultado de sus estudios, trabajos, investigaciones.

Y ya no hablo para nada de ningún resultado comercial, de éxito de ventas de ningún producto comercial de la nueva era, de ningún taller, de ninguna consulta, de ningún curso. Hablo puramente de la búsqueda personal y de la autocreencia y convicción que se tiene en cuáles son las conclusiones, a día de hoy, de esa búsqueda o encuentro personal.

Es bueno entregarse en cuerpo y alma a la cuestión del autoconocimiento, pero es bueno también saber dedicarse a otras cosas y no estar todo el día viendo interrelaciones energéticas en todas las cosas.

No hay que buscar las controversias, pero si se encuentran por el camino, creo que puede hallarse una lección positiva, un aprendizaje que ayuda a reforzar el camino y la actitud personal hacia estos temas: la espiritualidad humana, la búsqueda del sentido de la vida, el conocernos a nosotros mismos o conocer la naturaleza de nosotros y nuestra conciencia.

La espiritualidad o el estudio de nuestra espiritualidad es un asunto que yo veo aparte y diferenciado de lo que es la vivencia de nuestra vida cotidiana. No vas haciéndote amigo de todos los curas y monjas y gente espiritual que vas encontrando en tu camino. Quizás te haces amigo gente agnóstica o indiferente a las religiones. Y no pasa nada. Porque en realidad estamos poniendo a prueba cuánto de cuadriculados estamos. La gente que va de espiritual tiene un problema y es el creerse demasiado su propia espiritualidad y trascendencia, olvidándose que, como todo hijo de Dios, somos vulgarmente mortales; no suenan las trompetas de los ángeles cuando la gente espiritual eructa.