Artistas referentes

Me pongo a pensar en momentos de mi vida con personas que iban de artistas y, bueno, caramba me llevaba unos chascos… pura fachada, me sentía ridículo, haciendo y siguiendo el paripé. Ahora bien, cuando daba con un genio en estado puro, también había buenos momentos de quitarse el sombrero: el poeta Ledesma, estoy recordando, tenía una definición del amor buenísima, era algo así como sumar ingredientes como el azúcar, la taza… una composición que quedaba de lujo.

Artistas, me viene a la memoria un poema largo dedicado a los artistas que me gusta cantar. Yo veo de los artistas que somos un grupo muy heterogéneo; es más, digo somos y yo no soy artista, digo antes: “soy hombre, y después intento ser artista”. Pero, si siento respeto por los artistas que no se mojan, siento un mayor respeto por los artistas con un compromiso casi absoluto por lo que hacen. Es el caso de músicos; es el caso de artistas plásticos, pintores, personas que viven el arte de una forma tan exacerbada que arte y vida es prácticamente la misma cosa.

Me gustaría que grandísimas y grandísimos talentos llegaran a viejos, que no se acabaran a los 38 años como Boris Vian, a los pocos también como Elvis Presley, James Dean, o mi querido Antonio Vega que se nos fue sin tener que irse. Da rabia, dices: “coño llegad a viejos y viejas, no os muráis tan aprisa”. Pero es el destino quien decide.

La verdad es que hay personas que cuando desaparecen nada es lo mismo; y todos tenemos algunas de esas personas como referentes en nuestras vidas; puede ser un Gandhi asesinado; puede ser un Luther King; puede ser un Mandela encarcelado; puede ser un Víctor Jara, a quien le cortaron la lengua y las manos, por cantar. No sé, hay personas que las llevo conmigo en mi alma, y que hayan muerto o estén vivos no me importa. Van conmigo y son universales.
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