Despidiendo el año
Un año intenso este 2013. Seguimos aprendiendo de todo, de la ciencia, del arte, de la política, de la economía, de la psicología humana. Seguimos aprendiendo. La aventura de vivir es apasionante, pero está marcada y trucada de numerosos claroscuros. Más allá de las grandes decisiones que se toman en las grandes bolsas mundiales y en los grandes centros de poder, yo me pregunto por los seres humanos, individuales, de uno en uno, en estos comienzos del siglo XXI. Respuesta, en Japón contratan indigentes, por 70 euros diarios, personas sin techo para limpiar Fukushima. Muchas veces no queremos darnos cuenta de qué pasa a nuestro lado; tenemos orejas para solamente aquello que queremos escuchar. Yo no sé si a esto podríamos llamarle educación. Una educación que además de vivirse en las escuelas y en las familias, tiene que arraigarse en la mente de cada persona. Es la educación tan simple y tan sencilla de oiga usted, háganos el favor de no sembrar vientos o huracanes que